La Fiesta de la Tila.

Durante quince o veinte días el Tilo (Tilia cordata) se engalana deslumbrante:
 cubierto por completo con sus flores de color  amarillo-crema,
 lanza su llamada.


Todos los insectos del entorno acuden puntualmente a la Fiesta de la Tila. 
Bajo su influjo danzan, liban y se aparean insectos totalmente desconocidos, abejorros, mariposas....
Es la "Consagración de la Primavera".
Ya a 10 metros de distancia puede escucharse  un zumbido general en torno al árbol, hecho del batir de alas de miles de insectos muy variados, algunos  de los cuales solo se ven en esta ocasión.


La tila exhala su perfume. Es suave y dulce, y resultaría excesivo en un lugar cerrado, pero es delicado y sutil al aire libre. Es un aroma que, como la infusión, da paz.




 

Recoger tila es también una labor de paz. Una a una se van cortando las flores  con cuidado de no arrancar hojas del árbol, y por muchas flores que recojas la bolsa parece siempre liviana. 

Hace años, cuando regentaba una tienda de productos naturales y hierbas medicinales, quedé sorprendido por el elevado precio de la tila en relación a casi todas las demás hierbas. 
Ahora, al recogerla personalmente, comprendo que su valor se debe a  la paciencia y el cuidado con que se ha de hacer la tarea. 


Sólo me he atrevido a  acercarme  para cosechar al atardecer, 
 cuando los insectos desaparecen misteriosamente
 y la calma se instala en torno al árbol.


Decididamente BRF

 En los últimos días he convertido a bancales elevados una parte del huerto que quedaba aún  a la antigua usanza.  El resultado son cuatro bancales de 1m de ancho por 4,5m. de largo, o sea 18 m2 de área de cultivo.

Para  cubrir los bancales he estado  fabricando BRF.  Me ha parecido interesante experimentar con diferentes maderas, así que en uno  utilicé restos de sauce, en  otro espino blanco, en  otro  rosal silvestre (Rosa canina) y en el cuarto un poco de todo, incluyendo ramaje de un inmenso enebro (Juníperus horizontalis) que no para de crecer invadiendo una zona de paso y que debo podar cada año. Veremos como se porta cada acolchado. Respecto al enebro no he puesto gran cantidad porque creo que acidifica  el suelo y además las maderas  resinosas no son buenas para el biotriturador pues la resina se pega en las cuchillas.

Bancales en construcción

Terminados y con el riego y acolchado
En los caminos entre los bancales he acolchado con restos de cortacesped , pues así se evita demasiadas hierbas y la tierra no se reseca en exceso ni se embarra cuando llueve. Y no me gusta el suelo desnudo.

Como es tarde para plantar muchas hortalizas y como no tengo compost disponible para añadir, he pensado plantar  este año leguminosas, alubias y judías verdes, que aceptan un suelo pobre ya que lo enriquecen  por sí mismas captando el nitrógeno del aire. El año próximo podré rellenar los  bancales de compost  y pasarán a rotar con los demás.



Decididamente me decanto por el BRF frente a la paja por varias razones:

-- Es producto local, es decir que se produce en la propia finca y me permiten dar salida y utilidad a  los restos de desbroce; La paja debo traerla de otro sitio.
--Se descompone mucho mejor que la paja y no sólo contiene carbono-celulosa-lignina, sino toda clase de nutrientes en la proporción necesaria para la vida vegetal: Nitrógeno, polisacaridos...
-- Es delicioso el olor dulce que produce al fabricarlo y aplicarlo. Intuitivamente creo que esa dulzura es un regalo para la vida del bancal.


Aunque no lo llamen BRF, un vídeo muy interesante sobre el uso de restos de poda para el cultivo se puede ver en el siguiente enlace
Plantea cultivar directamente, sin ni siquiera compost, añadiendo sobre cualquier suelo  hasta medio metro de restos de poda, sin cavar ni remover e incluso sin riego. Digno de tener en cuenta.

 



Por lo demás, es tiempo de las primeras cosechas, calabacines, pepinos lechugas... Y las patatas aparecen espectaculares después de las últimas lluvias.Con estos 12 m2 de patatal tenemos para todo el año. He aquí una visión general del  huerto





 

  En el jardín, nunca había plantado Anémonas, pero han resultado hermosas y resistentes y sencillas de cultivar. Son de colores variados y muy alegres; aunque desconozco su especie.

Porqué los tomates saben a tomate?

Cuando comes hortalizas de un pequeño huerto descubres, con placer, que el tomate sabe de verdad  a tomate y la fresa a fresa.

Cual es el misterio? 
Es en realidad muy sencillo cuando comprendes qué es una planta.

Una judía, por ejemplo, o una semilla de tomate, es tan solo un pequeño código genético, lo más parecido a un programa de ordenador, y rodeado de alguna substancia de reserva para empezar a vivir.

Apenas la semilla dormida detecta el grado de humedad y de calor que esa especie  en particular necesita, se pone en marcha. Echa raíces hacia abajo y tallo hacia arriba  (¿por que no lo hace al revés? ) y empieza a transformar la materia del suelo en hojas, tallo, flores  y frutos.

Estas frambuesas y las otras fotos son del año pasado
Es un proceso que podríamos llamar mágico, tan  hermoso cuando podemos  contemplarlo acelerado en un vídeo. Es la sabiduría presente en toda  vida. Cada planta "sabe" lo que debe hacer.

La planta se va construyendo con los minerales presentes en el suelo y con agua. Cada especie sabe lo que ha de tomar del suelo y en que cantidad y en que momento, así que si cultivo en el mismo suelo un tomate al lado de un pimiento, cada uno tiene su peculiar sabor.

Es la inteligencia vegetal.

Tres son los elementos más abundantes e imprescindibles: El nitrógeno que da crecimiento vigoroso a la planta; el Fósforo que le ayuda a crear los retoños, las flores y los frutos; y el Potasio que le da dureza, salud, fortaleza y resistencia a la enfermedad.

Pero hay muchas más  elementos en cualquier suelo: manganeso, boro, molibdeno azufre, zinc, magnesio... En un buen suelo  todos están presentes. También en un buen compost, disponibles para la planta.

Sin embargo en los cultivos intensivos se abona casi únicamente con los tres imprescindibles (N. P. K.) de modo que a cada cosecha los demás elementos van escaseando y el pobre tomate o la judía ya no consiguen boro o zinc... 
Sobreviven y dan fruto, pero éste carece del sabor que le corresponde.


El suelo está en realidad inerte,  ya no tiene reserva de minerales y solo vive de lo que se va aportando.



Por eso el sabor de estas berenjenas  y pepinos de nuestro huerto es tan  delicioso.


Los árboles de este año

Este año hemos centrado la plantación de árboles  en un seto de Cupressocyparis leylandii en uno de los linderos del Jardín. Es una zona que rodea al huerto y que estaba demasiado abierta al norte y al viento y la intención es protegerla  y darle intimidad. Hemos plantado una variedad de color verde sobrio que es la más resistente a este clima, pues la variedad dorada "Castelwelland Gold" sufre  con las heladas intensas y tiene menor desarrollo. El crecimiento de este híbrido es sensacional  como puede verse en las fotos. Estos árboles tienen unos 12 años de vida

La tierra era muy arcillosa y dura pues  aunque lleva unos quince años en reposo, fue en otro tiempo cultivo de cereal  y ha sido trabajoso aligerarla con el motocultor y desarraigar los abundantes rosales silvestres (Rosa canina) que habían prosperado en esa parte.  

Tengo fe en  que los cipreses conseguirán  hacer su trabajo a pesar de lo difícil del terreno.  Como deseábamos un seto informal, los he plantado  a distancias de 1,5 m.entre sí ( aunque se recomienda plantarlos más juntos). y a 3m. del camino que bordea el huerto.

El laborioso proceso fue el siguiente: Primero cortamos una a una con tijeras de podar los innumerables Rosa canina y con la trituradora  las  convertimos en BRF que  sirvió de acolchado para el seto. Después pasé el cortacesped para despejar la zona de hierba alta y poder trabajar con comodidad. Luego removimos la tierra con el motocultor en una franja de unos 30 m. de largo y 1m. de ancho. Hubo que desarraigar los tocones de rosal silvestre con el pico  y la axzada uno a uno.  

Luego la tarea fácil de plantar los cipreses, ponerles un riego gota a gota y acolchar.  Hace ya casi un mes y hasta el momento parecen estar en perfecto estado de salud.
 

Para aportar una nota de color  frente al seto verde hemos plantado también un Prunus cerasifera "Pissardii".  que apenas se ve al fondo  en la foto. Aunque no tiene el seto de fondo, se le ve balancearse al viento con su copa rojiza y ofrece profundidad a esa zona del jardín que antes  pasaba desapercibida. Ha sido como conquistar en trozo nuevo, y es agradable acercarse hasta allí durante un paseo.


Otras plantaciones han sido:  Buxus sempervirens que pienso recortar en forma de bola en un parterre. Otro Buxus sempervirens Var. "elegans" que tiene hoja jaspeada y al que pienso dar forma algo cónica, cercano al anterior y una Forsythia que en su día alcanzará  el esplendor que le  corresponde.

Es tiempo de mucha flor y de frutos incipientes he aquí unos ejemplos: 











El Aesculus hipocastanum se vistió de blanco.








 El Cerastium tomentosum se desborda por doquier.




  La Arañuela, Nigella damascena, vuelve a estar de moda. Este año han salido muchas de este  bonito azul, además de las blancas clásicas
l


Y comeremos grosellas si los pájaros no se adelantan.






Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...